ni cuando enseño los dientes
ni cuando frunjo el ceño
Con los mejores me mido
Y siempre soy paciente
no me falta el empeño
Será por eso
Que tengo el poder de un niño
de aprender si quiero siempre
Y vivir como en un sueño
Pero estoy tan tranquilo
Que se aburre mi gente
Y creen que paso de ellos...
Pero lo guardo todo, tengo el síndrome de Diógenes
Tengo un álbum de fotos
que no tiene portada, ni páginas
Lo que se ve cuando se mira
Es mi frente, manchada de sangre
por aguantar tantas toneladas.
Los recuerdos que quieren huir
los tengo bien atados
Pues son mis retratos más preciados
Quiero venir a verte
Podemos intercambiarlos
Y hacer de nuevos
Quiero hacerte escuchar
La poesía que sale de mis huevos
¿Eso te da miedo?
Estoy harto de dejarlo para luego
Esto tenía que estar listo para ayer
Nunca es tarde para probar la miel...
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