Al carajo con darle nombre a los matices
Cuando hube perdido la esperanza de llegar a comprender
Las intenciones que anidan en el fondo de los ojos
De con quien me cruzo
Creo que empecé a entender
Si todos en el globo vivimos de maneras sangrantes. Y lo sobrevivimos de distintos modos.
Poco nos queda, más que confiar en el instinto
No sé de qué me asustaba.
Ahora. Por querer detener el tiempo
Veo miradas con angustia y rencor en casa. Luego pienso y caigo
En que yo haría lo mismo.
El ideal de paz y tranquilidad como mordaza y ataduras. El no querer mostrar idea como cordialidad.
Qué dilema ser cordial
Que sufrido ser inmóvil
Qué poco vale una promesa si no te comprometes contigo mismo.
Qué catastrófico se siente ahora
Haber sido capaz
De huir de todo
Qué inútil fue la huida
Qué bochornoso el retorno
Pero qué bien conozco los límites de mí y de mi yo
Y qué ganas tengo de contártelo.
Vivir como animal es el reto
Dialéctico es el método
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